Polly Samson y David Gilmour: amor y música en "Luck and Strange"

El álbum de Samson explora el miedo y la devoción en el marco de una pandemia global
Polly Samson, elegante y articulada a sus 62 años, se sumerge en la vulnerabilidad y la pasión en su nuevo álbum Luck and Strange, que se estrena el 6 de septiembre. Este es su primer trabajo en solitario en más de nueve años y es un testimonio de su duradero matrimonio con David Gilmour, el icónico guitarrista de Pink Floyd.
En una conversación íntima a bordo del Astoria, la casa flotante-estudio de Gilmour en el Támesis, Samson revela cómo la pandemia intensificó su miedo a perder a su esposo. "Me obsesioné durante la etapa de aislamiento con la idea de que David pudiera morir y dejarme sola," confiesa Samson. "Fue inaguantable y agonizante." Este temor y su amor inmutable forman el núcleo de Luck and Strange, un álbum que explora la conexión profunda y el compromiso en medio de una crisis global.
Gilmour y Samson, que han trabajado juntos durante más de tres décadas, se sumergen en temas de mortalidad y amor en las letras del álbum, destacando cómo la pandemia sirvió como una "esclusa de tiempo" que los obligó a enfrentarse a sus propios miedos y a concentrarse en la creación musical. La colaboración familiar es una característica central del proyecto: su hijo Joe Gilmour, captado en una grabación infantil, y su hija Romany, que canta y toca el arpa, aportan un toque personal al trabajo.
La pareja, que mantiene una vida familiar activa y rica en experiencias, muestra una dinámica amorosa y juguetona que se refleja en su música. Aunque Gilmour a veces es reservado, comparte que ha estado pensando intensamente en la mortalidad desde su juventud. "La inmortalidad ya no es una opción," dice, aunque sigue con buen humor y vitalidad.
El álbum también toca temas más amplios, como las tensiones recientes entre Samson y Roger Waters, exintegrante de Pink Floyd, a raíz de controversias políticas. La posibilidad de una reunión con Waters es rechazada por Gilmour, aunque no descarta futuras colaboraciones con el baterista Nick Mason.
Mientras Samson y Gilmour se preparan para una pequeña gira mundial, el entusiasmo por su música sigue intacto. "Nunca me he divertido tanto," dice Gilmour. Con Luck and Strange, la pareja se embarca en una nueva etapa creativa, con planes ya en marcha para futuros proyectos. En un reflejo de su duradera relación, ambos coinciden en que no cambiarían nada el uno del otro, celebrando 30 años juntos con un amor que sigue inspirando su arte.