Deshielo en la Antártida aumenta tormentas en el hemisferio sur

Estudio revela el impacto del deshielo antártico en el clima


Un estudio publicado este miércoles en la revista Nature resalta los efectos del deshielo sin precedentes de la banquisa antártica en la intensificación de las tormentas en el hemisferio sur. La investigación dirigida por Simon Josey, del Centro Nacional de Oceanografía de Southampton, muestra cómo el deshielo en 2023 ha provocado un aumento significativo en la transferencia de calor entre el océano y la atmósfera.

Según el estudio, la falta de regeneración completa del hielo marino durante el invierno de 2023 ha dejado grandes áreas de océano expuestas. Esta disminución excepcional en la cobertura de la banquisa ha facilitado la transferencia de calor desde las aguas oceánicas hacia la atmósfera, alterando las condiciones climáticas.


Aumento de tormentas y vientos más fuertes


El estudio muestra que, en 2023, varias regiones antárticas experimentaron hasta siete días adicionales de vientos superiores a los 35 km/h, en comparación con los inviernos previos entre 1990 y 2015. La reducción de la banquisa en algunas áreas alcanzó hasta un 80% en comparación con el promedio antes de 2016.

El deshielo de la banquisa duplicó la cantidad de calor transferido desde el océano hacia la atmósfera, lo que contribuyó a condiciones meteorológicas más inestables y un aumento en la frecuencia de tormentas. Esta alteración del equilibrio térmico tiene implicaciones no solo para el hemisferio sur, sino que podría extenderse globalmente.

Los investigadores advierten que si estos episodios de deshielo continúan, podrían desencadenar cambios climáticos significativos que afecten tanto a los trópicos como al hemisferio norte. A pesar de los hallazgos, los científicos aseguran que se requieren más estudios para confirmar la relación causal entre el deshielo y el aumento de tormentas.

El estudio subraya la necesidad de investigaciones adicionales para comprender mejor cómo estos cambios en la banquisa pueden influir en el clima global y las condiciones meteorológicas a largo plazo.