Hija de Álvarez-Buylla exhibe lujoso estudio de arte mientras su madre enfrenta denuncia por irregularidades en Conacyt

La artista Jimena García Álvarez-Buylla muestra su exclusivo taller en casa de la exdirectora del Conacyt, justo cuando la ASF denuncia por malos manejos del erario


Un estudio de lujo en el corazón del Ajusco

Jimena García Álvarez-Buylla, hija de la exdirectora del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez-Buylla, ha generado controversia al mostrar su nuevo estudio de arte en una revista internacional. El espacio, diseñado por la firma mexicana Estudio MMX, se ubica dentro de la propiedad familiar en Tlalpan, Ciudad de México. La estructura, descrita como una "oasis triangular de ladrillo y vegetación", ha sido elogiada por su diseño minimalista y sofisticado.


La polémica estalla en redes sociales

La publicación de las imágenes del estudio en la revista estadounidense Dwell ha desatado una ola de críticas en redes sociales. Usuarios señalan la contradicción entre el lujo del inmueble y el discurso de austeridad promovido por la administración de la "Cuarta Transformación", al que pertenece su madre. Ante la avalancha de comentarios negativos, Jimena García optó por eliminar su cuenta de Instagram.


Denuncia por irregularidades en Conacyt

La controversia se intensificó cuando la Auditoría Superior de la Federación (ASF) presentó una denuncia penal contra María Elena Álvarez-Buylla por presuntos malos manejos de recursos públicos durante su gestión al frente del Conacyt. La ASF identificó posibles daños al erario por más de 57 millones de pesos, relacionados con la extinción de cuatro fondos institucionales. Entre las irregularidades se encuentran pagos no comprobados y documentación inconsistente. La Fiscalía General de la República ha abierto una carpeta de investigación al respecto.

Respuesta de la exdirectora del Conacyt

María Elena Álvarez-Buylla ha defendido su gestión, asegurando que el proceso de extinción de los fondos fue transparente y apegado a la normativa. Explicó que las irregularidades señaladas por la ASF corresponden a un contrato de servicios donde no se identificaron constancias de los entregables que justifican el ejercicio del gasto. Indicó que esta situación implicó la renuncia de algunos directivos y el seguimiento de los procedimientos conducentes.


Un contraste que genera cuestionamientos

La coincidencia temporal entre la denuncia por irregularidades en Conacyt y la exhibición del lujoso estudio de arte ha generado cuestionamientos sobre la congruencia entre el discurso oficial y las prácticas personales. La situación pone en evidencia las tensiones entre la austeridad promovida por el gobierno y el estilo de vida de algunos de sus miembros y allegados.