La autopista Arco Norte se ha convertido en escenario de violencia creciente contra transportistas, como quedó patente en un alarmante video difundido en redes sociales. En la grabación, captada por la cámara de seguridad de un tractocamión de carga, se observa cómo hombres armados disparan al menos 22 veces contra el vehículo pesado mientras circulaba en el tramo entre Jilotepec y la primera caseta de Tula de Allende, en dirección a Puebla.

La agresión se llevó a cabo a plena luz del día y en ausencia de vigilancia, pese a que la Guardia Nacional División Carreteras tiene a su cargo la seguridad de esta vía federal.

En el video, se escucha a los transportistas cuestionar la falta de presencia de la corporación de seguridad asignada a la autopista. Los agresores, que viajaban en dos camionetas tipo pickup, una negra y otra blanca, bloquearon el paso del tráiler, obligando al conductor a detenerse y disparando repetidamente en un intento de asalto y agresión directa.

A pesar de los disparos, el transportista logró evadir a los agresores y continuar su camino. Sin embargo, esta situación de inseguridad no es un caso aislado en el Arco Norte, donde tanto automovilistas como transportistas se han convertido en blanco de la delincuencia debido a la falta de presencia policial efectiva.

Esta violencia se suma a otras preocupaciones, como la falta de mantenimiento en la autopista, a pesar de las altas tarifas de peaje que los operadores de transporte federal deben pagar para transitar por la misma, llegando incluso a desembolsar hasta dos mil pesos. La combinación de inseguridad y falta de infraestructura adecuada representa un grave riesgo para la seguridad y el bienestar de quienes utilizan esta importante vía de comunicación en el país.